Hace dos días, ya pude ver mis primeras águilas culebreras (Circaetus gallicus, Short-toed Eagle) sobrevolando Chinchilla, en concreto, la Plaza de La Mancha. Cuatro ejemplares preciosos, juntos, en dirección claramente hacia el Norte. Me alegra verlas ya por aquí.
Todo sigue su curso, y las aves migratorias ya llegan. Rafa me comentaba esta mañana que ya estaba viendo las primeras collalbas grises (Oenanthe oenanthe, Northern Wheatear) y rubias (O. hispanica, Black-eared Wheatear). Pero hoy, por fin, he visto una de mis aves preferidas, el alcaraván (Burhinus oedicnemus, Stone Curlew). Aun siendo invernantes en el Centro Ibérico, por mi zona no suelo ver (de hecho yo no he visto ninguno) en invierno. Esta tarde estaban todos revolucionados por lo visto. He visto nada menos que seis individuos a lo largo de una carretera de aproximadamente 25 km. Oírles entonar sus cantos aflautados, llamándose unos a los otros, llamando también al personaje de R. S. Ferlosio, es algo que me llena de alegría: pronto llegará el calor y con él más avifauna. El primer alcaraván, cerca de La Felipa, estaba solo, y al acercar el coche, se ha sentado, haciendo casi imposible pillarlo con los prismáticos. Argh, qué listos son. Pero al acercarme, el animal ha huido poco a poco, levantando el vuelo y cruzando la carretera, donde le esperaba otro individuo. Ahí los dos se han vuelto locos "cantando". Más adelante, pasada La Felipa hacia Valdeganga, otro ejemplar solitario, y más adelante, otros dos junticos, y después otro. No recordaba casi lo grandes que eran con las alas extendidas.
En Albacete, popularmente se la ha llamado chorlito. Supongo que es un nombre onomatopéyico, chorlito, chorliiiiiiiii, chorliiiiiiiiii, chorliiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii. ¿Qué? Intento imitar el canto de un alcaraván para que lo entendáis, hombreyà. Igual que en inglés, que se le llama Stone Curlew (zarapito es Curlew).
Al fin monean por nuestros campos, qué gusto oirlos cantar al atardecer... Por cierto, el dibujo de arriba es aproximativo. Me cuesta muchísimo plasmar la expresión facial de los alcaravanes, me parece que cada uno tiene una cara, y no haber podido vislumbrarlo claramente no ha ayudado absolutamente nada a retratarlo. Pero lo cierto es que estos bichos me tienen enamorao...
Carraquia o alcaravania, como lo querráis llamar. |